lunes, 8 de abril de 2013

Planeación con actividad Poética de Nicolás Guillén


UNIDAD 1. Diversidad poética
Actividad 2.Lectura de un poema lírico
b) ¿Cuáles son las emociones que encontramos en el poema y cuáles son los versos en los que éstas se expresan? Elabora un cuadro como el siguiente, o alguna otra forma que prefieras para esquematizar tu respuesta.  “Los heraldos negros” Cesar Vallejo
verso
Interpretación y emociones
Hay golpes en la vida tan fuertes... ¡Yo no sé!
Golpes como del odio de Dios; como si ante ellos,
la resaca de todo lo sufrido
se empozara en el alma... ¡Yo no sé!

La emoción del dolor de la vida, de la desgracia del vivir, de los golpes contundentes que son capaces de pulverizar “ante la resaca de todo lo sufrido”, el alma del hombre se cimbra se lastima, se llena de dolor de haber sufrido, revela su compromiso ante el ser humano desgarrado por una feroz dialéctica entre el hombre y su mundo enajenado en el que existe. Hay una crisis religiosa “como del odio de Dios” ante los embates de la vida, y se dice a sí mismo, yo no sé……. Los golpes diarios que Dios nos da son el símbolo de una confabulación del tiempo y del espacio contra el hombre.La emoción de la crisis religiosa, del odio de Dios ante los hombres.

Son pocos, pero son... Abren zanjas oscuras
en el rostro más fiero y en el lomo más fuerte.
Serán tal vez los potros de bárbaros Atilas,
o los heraldos negros que nos manda la muerte.
En el tercer párrafo, Vallejo nos confirma que estos golpes son pocos  pero abismales, que parece que perdemos la vida. Ante ellos, hasta “el rostro más fiero se tuerce, hasta el lomo más fuerte se hunde.” Es el dolor cotidiano del hombre frente a su cotidianidad. No podemos hacer nada para evitar estos golpes, estos sufrimientos, pero los tenemos que recibir; y el sentimiento es de dolor, de angustia, de muerte. Que al final de todo solo son mensajeros negros que nos manda la muerte. El dolor es emocional, no físico ante la enfermedad del hijo,  o la muerte del esposo.
Son las caídas hondas de los Cristos del alma,
de alguna fe adorable que el Destino blasfema.
Estos golpes sangrientos son las crepitaciones
de algún pan que en la puerta del horno se nos quema.

En el tercer párrafo, Vallejo también nossorprende al aclararnos que estas tragedias son injustas y que no son consecuencia demalas acciones, aunque tal vez sí deldescuido y del exceso de optimismo. Hasta”los Cristos del alma” sufren estas hondas caídas. El Destino, simplemente se burla desu santidad. Vallejo habla también de los golpes de la vida, que son precedidos por una gran expectativa y optimismo, como la esperanza de comernos un delicioso pan que ya está casi listo, pero que al final se nosquema en la puerta del horno. La emoción del dolor, de la tragedia por las caídas. El sentimiento de burla del destino.
Y el hombre... ¡Pobre hombre!... Vuelve los ojos, como
cuando por sobre el hombro nos llama una palmada
vuelve los ojos locos, y todo lo vivido
se empoza, como charco de culpa, en la mirada. Hay golpes en la vida, tan fuertes... ¡Yo no sé!
Aquí Vallejo describe  la naturaleza delhombre bueno ante las desgracias. Vallejodice que a pesar de que estos golpes son producto de la mala suerte, “el hombre, pobre, pobre,” se siente culpable, y cree que la tragedia es producto de “todo lo vivido”,de todas sus acciones, y toda “esa culpa se empoza en su mirada.” En conclusión, Vallejonos habla de esos golpes emocionales quenos causan una profunda y dolorosa melancolía, para los cuales jamás estaremos preparados, y de los que no tenemos mayor culpa, aunque pensemos lo contrario. Hay golpes en la vida, tan fuertes. Yo no sé.

c) Responde la siguiente pregunta: ¿Cuáles situaciones humanas se te ocurre que pudieron dar lugar a tales emociones? (Las posibilidades son muchas, basta con que imagines dos situaciones para que tu respuesta sea válida.)
1. Las situaciones humanas que dieron lugar a este poema “Los heraldos negros” fue la situación del hombre peruano, condenado por su sangre india, que está condenado al sufrimiento, a la soledad, pero nunca a la resignación. Habla de la situación del hombre perdido  frente a la religión dirigido por Dios  y al destino miserable del hombre con su impotencia. En "Los Heraldos Negros" Vallejo se siente abandonado, perdido en un universo comandado por Dios, por la religión. Es importante recordar que Vallejo,  nace en un hogar católico y es educado bajo esa religión, a los que debe el escritor  la fuente de  sus sentimientos que se asocian directamente al espíritu. Se puede ver que hasta en los peores momentos de su vida, en los momentos en que la amargura lo impulsa a olvidar toda creencia, se expresan en él estas enseñanzas que lo hacen negarse a dar todo por perdido. Al nombrar el destino como una justificación de las penas sufridas, el autor da a entender que estos golpes son irreversibles, inevitables, pero aún así no baja los brazos.
2. La situación simbolizada del pueblo peruano lleno de frustración y de humillación que padece una horrible explotación, el poeta asume el dolor colectivo hasta que llegue a su verdadera conclusión, el triste designio de ser peruano. El autor denuncia la imagen de un Perú humillado que padece de una horrible explotación. Vallejo asume el dolor colectivo, dejando que esa frustración fluya sin ningún límite, hasta que llegue a su verdadera conclusión, al triste designio de ser peruano. En este caso, se nota la intensidad con la que fue escrito el poema, que describe sin remordimientos el dolor de una persona y los golpes a los que, inevitablemente, tendrá que enfrentarse tarde o temprano. Es notable que en este poema el autor  manifiesta los  grandes miedos del ser humano.
d) Sin duda los dos textos que has leído pueden describirse como poemas, sin embargo, atendiendo a lo que se expresa en ambos poemas, existen diferencias. Relee tus respuestas anteriores y, con apoyo en ellas, redacta uno o dos párrafos en  donde expliques cuáles son las principales diferencias que encuentras en cuanto a lo que ambos poemas dicen.
“La muerte de Antoñito Comborio”, de Federico García Lorca, está ubicado en la España de la guerra civil española, ya que hasta dentro del texto dice “hay Federico García habla a la guardia civil, ya mi talle se ha quebrado como caña de maíz”. Aquí se ubica el trabajo en uno de los poemas que integran el Romancero Gitano”, donde se ubica el mundo lorquiano lleno de gitanos, muerte, noche, cuchillos, muerte, luna sin olvidar las metáforas brillantes que soportan toda la estructura riquísima del escritor.
En cambio El poema "Los Heraldos Negros" de César Vallejo nos permite conocer los sentimientos de un hombre triste que describe a la perfección cómo se siente enfrentarse a los golpes que irrevocablemente se presentan en la vida de todo ser humano. El hombre condenado eternamente al dolor de enfrentarse ante la vida, el sufrimiento por los golpes, la soledad del mismo, ya que el hombre sólo recibe “el odio de Dios”, dejando al hombre frente a los heraldos negros de la muerte que traen tristeza, sufrimiento, soledad, abandonado a su propio destino que es la muerte. 

CANTO NEGRO Nicolas Guillén
¡Yambambó, yambambé!
Repica el congo solongo,
repica el negro bien negro;
congo solongo del Songo
baila yambó sobre un pie.

Mamatomba,
serembe cuserembá.

El negro canta y se ajuma,
el negro se ajuma y canta,
el negro canta y se va.
Acuememe serembó,

yambó,
aé.

Tamba, tamba, tamba, tamba,
tamba del negro que tumba;
tumba del negro, caramba,
caramba, que el negro tumba:
¡yamba, yambó, yambambé!

Calabó y bambú.
Bambú y calabó.
El Gran Cocoroco dice: tu-cu-tú.
La Gran Cocoroca dice: to-co-tó.
Es el sol de hierro que arde en Tombuctú.
Es la danza negra de Fernando Poo.
El cerdo en el fango gruñe: pru-pru-prú.
El sapo en la charca sueña: cro-cro-cró.
Calabó y bambú.
Bambú y calabó.

Rompen los junjunes en furiosa u.
Los gongos trepidan con profunda o.
Es la raza negra que ondulando va
en el ritmo gordo del mariyandá.
Llegan los botucos a la fiesta ya.
Danza que te danza la negra se da.

Calabó y bambú.
Bambú y calabó.
El Gran Cocoroco dice: tu-cu-tú.
La Gran Cocoroca dice: to-co-tó.

Pasan tierras rojas, islas de betún:
Haití, Martinica, Congo, Camerún;
las papiamentosas antillas del ron
y las patualesas islas del volcán,
que en el grave son
del canto se dan.

Calabó y bambú.
Bambú y calabó.
Es el sol de hierro que arde en Tombuctú.
Es la danza negra de Fernando Poo.
El alma africana que vibrando está
en el ritmo gordo del mariyandá.

Calabó y bambú.
Bambú y calabó.
El Gran Cocoroco dice: tu-cu-tú.
La Gran Cocoroca dice: to-co-tó.


Este tipo de lectura de poemas en voz alta, los he  realizado desde el principio de mi actividad docente durante casi 30  años de impartir clases;  al principio les da risa, a los alumnos, ya que el comentario general es “parecen trabalenguas”, pero cuándo ya vamos con el 5º. O 6º compañero que lee el poema en voz alta, tomando en cuenta, la entonación, tesitura, volumen, tono, pronunciación correcta de las palabras, lo empiezan a disfrutar y se nota un fuerte avance en la oralidad, que es uno de los grandes vacíos de los programas ya que no hay aprendizajes dirigido a esta actividad. Y cuándo se graban los jóvenes se  sienten maravillados al escucharse.
El comentario general de los jóvenes es de agrado, ya que ellos con la  experiencia de escuchar el poema en voz alta, (de sus compañeros), así como cuándo se graban ellos mismos; se dan cuenta de la sonoridad de los versos “cuando lo están pronunciado”  y sobretodo los de Guillén, cuyo ritmo nos trae a la mente las raíces afro antillanas del autor, “por qué te pone tan bravo. Cuando te dicen negro bembón, si tiene la boca santa, negro bembón”; “no sé por qué piensas tú, soldado, que te odio yo, si somos la misma cosa yo, tú, tú yo”; “lengua con punta de hueso, tambor de cuero “ “ la culebra tiene ojos de vidrio, la culebra viene en un pato, con sus ojos de vidrio la culebra camina sin patas, la culebra se esconde en la hierba, mayombé, bombe, mayombé, mayombe, bombe, mayombe, mayombe, bombe, mayombe.”;“Yambambó yambambé, repica el conso solongo, repica el negro bien negro, congo solongo del songo, baila yambó sobre un pie” “ ya yo me enteré mulata, que dice que yo tengo la narise como nudo de cobbata”.
 Los estudiantes se dan cuenta que estos poemas tienen una construcción rítmica, que en su origen fueron hechas para decirse en voz alta o acompañadas de música es decir, rítmicamente, así que esta cualidad rítmica es uno de los elementos que hacen especial a la poesía de otras expresiones verbales.
 los alumnos empiezan a disfrutar del ritmo musical del poema que ha sido introducido también en las canciones cuyos poemas han sido musicalizados; como los de Canto negro,  la muralla, la mulata la canción del negrito,  me matan si no trabajo, la canción del che Guevara, sensemayá; etc. Éste último ha sido musicalizado por diversos grupos latinoamericanos y orquestas sinfónicas.  Estas formas poéticas son originalmente poemas y posteriormente se han convertido en canciones que en mucho  se debe a su construcción rítmica.Por lo tanto es conveniente hacer ejercicios de éste tipo con los alumnos, ya que los poetas usan las palabras no sólo para que transmitan ideas o sentimientos, sino también para que “suenen” 
para que tengan ritmo, en el oído del lector, para que tenga ritmo el corazón del hombre.




Nicolás Guillén



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